Ir al contenido principal

Entradas

Mostrando entradas de diciembre, 2011

®Dante y Gorostiza: La caída sin retorno

®Dante y Gorostiza:  La caída sin retorno GUSTAVE DORÉ: IL INFERNO CASA DONDE NACIÓ IL DANTE, EN FLORENCIA, ITALIA Al cantar la epopeya, Homero no imaginó el temple de los dioses griegos marcando de manera definitiva el espíritu de su pueblo. Otros poetas llevaron su canto a los rincones helenos portando en cada palabra el estigma de la grandeza y la eternidad, pero quizás tampoco lo supieron. La palabra fue entonces vehículo de cohesión, con ella se hilvanó la fortaleza de occidente. La plenitud homérica no se miró en realidad sino después, cuando sus cantos se fundieron con las aspiraciones del mundo occidental. El imperio romano, heredero directo de sus construcciones fantásticas, cayó; pero el héroe cantado por Homero continuó forjando la visión con que surgieron las naciones. Homero fue un anfitrión patriarca esparciendo sus migas a lo largo de los siglos; desde los infiernos filosóficos de Platón, a la Estigia de Dante,

Todo pasaría bajo el efecto gris de la lluvia...

Entonces llegaría al café y un anónimo muchacho pasaría buscando un libro de Bukowski. Tendría que ir con una chamarra azul debajo de la lluvia, porque del otro lado de la calle, alguien saltaría para guarecerse. Mario Gallardo, molesto por una lectura reseñada con sordera en una revista de la capital, endulzaría su café recordando a Bolaño y se imaginaría a Santiago levantando su bote de licor en un pequeño bar. En una de las mesas del rincón, se escucharía la voz persistente de dos tipos empecinados en un lejano proyecto literario, un boletín, una revista, un video clip, cualquier cosa, con un maravillado sentimiento. Todo pasaría tan fugaz bajo el efecto gris de la lluvia para que ese recuerdo empezara a materializarse. Armando García y Helen Umaña, emocionados, leerían un inmenso tomo de la nueva literatura hondureña en la pequeña radio que nadie enciende siquiera por consideración, pero leerían con fe en que alguien escucha. Helen tendría cierta plenitud en la voz, un poco de hum

LOS POETAS SON USTEDES

Deben saber que los poetas son ustedes, los que no poseen ni sombra, ni su propio manantial, ni desierto, ni espejismo. En medio de la multitud les he visto extraviados, con una fiebre de años, condenados a cargar un pequeño saco roto en el que todo se desangra. Ahí han pervivido resistiendo el tiempo, murmurando un dolor interminable. Pero he visto sus ojos claros, limpios, y a través de ellos el horizonte cambia constantemente. Por eso sé que los poetas son ustedes. En el Paseo Real de las Chimeneas Gigantes. Trinidad , S.B. 10 de diciembre de 2011. .......................................................................................

TODO HA CONJURADO

Para que la poesía muriera nos pusimos de acuerdo y fuimos cínicos, claros,  impasibles. Conjuró nuestro aburrimiento de toda esa perorata sobre la belleza, quedamos hastiados de Octavio Paz, de su mayéutica pseudo socrática, de su abismal cerebralidad, nos cansó también Sabines, buscamos un poco de frescura y sólo había música, baladas insufribles. El cielo tenía un encanto de basurero y las ratas y su perfume salobre seguían recordándonos las calles de un Baudelaire abuelo. Para que muriera la poesía se desvaneció el torrente de Rimbaud, las alturas de Neruda, el bramido de Vallejo. Pero ya antes nuestro desdén desangraba su cólera golpeando con el muñón la pared de las ranas y su croar hecho a base de palabras incongruentes…¿Qué putas es la poesía? ¿Una larva francesa convertida en lengua de vaca? ¿Ladrillo? ¿El fustán de una vieja que hace pan casero? ¿Una piedra mítica de Grecia?  Conjuró toda esta resbalosa e insalubre caries de la palabra. Algunos confundieron

Estudios, ensayos y artículos sobre la obra de Jorge Martínez Mejía

LA CAÍDA Y EL VACÍO EN PAPIRO Por Héctor M. Leyva Dos autores se han ocupado en años recientes de estudiar la producción poética hondureña de las dos pasadas décadas, Helen Umaña en el último de sus tres grandes e importantes volúmenes dedicados a la historia literaria del país, La palabra iluminada (2006, LPI de aquí en adelante) y Salvador Madrid en una antología también importante: La hora siguiente, Poesía emergente de Honduras (1988-2004) (2005, LHS, de aquí en adelante).  Los autores ofrecen una imagen múltiple y diversa de esta nueva poesía (Helen Umaña reseñó la obra de 55 poetas, hombres y mujeres, nacidos entre 1954 y 1983, de quienes Salvador Madrid incluyó textos de 27 en su antología). No obstante, a pesar de la heterogeneidad, ambos autores coinciden en destacar el desencanto como una de las características notoriamente presentes en la última poesía. Helen Umaña se refiere a una crisis en el horizonte ideológico que ha motivado una vuelta al intimismo (

POETAS DEL GRADO CERO, SEGUNDO MANIFIESTO

...................................................................... (2008) Nada resucita a los Demiurgos y sus joyas putativas Año de los clones literarios, blogs, fantasmas cibernéticos y anonimato agresivo. ¡Por una puta poética todos estamos muertos! En una buhardilla, un maldito poeta anónimo supone darle respiración boca a boca a la puta muerta, convertida por arte de un conjuro de los Poetas del Grado Cero, en una vieja senil, cadavérica y apestosa. El maldito poeta ha empezado a sentir cierta predilección por el sabor a tierra, a estiércol y a polvo de librería. Quiere consumar el acto del entierro como si con semejante actitud, la belleza sumergida en la memoria de los que pesquisan en la sombra, será recordada. La puta está muerta y hace mucho tiempo fue quemada viva en la imagen de una boina. El maldito poeta que la entierra, también está muerto, el aburrido lector que lee esto, también está muerto. Todos estamos muertos por la puta poética que ya fue sepultada.